El cartucho cerámico es un producto de larga duración que garantiza la estanqueidad y el funcionamiento sin problemas del accesorio. Su superficie lisa evita los depósitos de cal. El ángulo de rotación del cartucho es de 90°, lo que permite una apertura y cierre rápidos. Está hecho de latón y el pasador de montaje tiene 20 muescas. El producto está diseñado para un grifo de dos manijas y agua fría.